El pasado 13 de mayo, en el restaurante Dani Brasserie del Hotel Four Seasons Madrid, tuvo lugar un evento muy especial: el ronqueo de un atún rojo de almadraba. Para quienes no lo conocen, el ronqueo es la técnica tradicional para cortar y despiece el atún de forma profesional, sacando todas las piezas aprovechables con cuidado y respeto. Esta demostración acerca a la gente al producto, mostrando la importancia del origen, la calidad y la técnica detrás de un buen plato de atún.
El atún rojo de almadraba es uno de los productos más valorados en la cocina española y mediterránea. La almadraba es la técnica tradicional que se usa en las costas del sur de España para pescar atún de forma sostenible. Por eso, la llegada de un atún de almadraba a un restaurante como Dani Brasserie es todo un acontecimiento.

El proceso del ronqueo paso a paso
El día del evento, el restaurante se preparó para recibir un atún de gran tamaño. Dani Garcia junto al equipo de Gadira, enseñaron a los asistentes cada paso del ronqueo, desde la colocación del atún hasta los cortes más delicados. El ronqueo no es solo cortar, sino conocer la anatomía del atún para sacar cada pieza de la mejor manera posible.
Durante la demostración, los asistentes vieron cómo el cuchillo se movía con precisión para hacer cortes limpios y perfectos, sin desperdiciar nada. Aprendieron que en un buen ronqueo nada se pierde: las piezas menos conocidas se aprovechan para guisos, conservas o caldos, manteniendo el respeto por el producto y la sostenibilidad.
La importancia del ronqueo en la gastronomía
El ronqueo es mucho más que una técnica de corte; es un arte que forma parte de la cultura gastronómica española. Saber despiece un atún correctamente permite aprovechar todas sus partes y respetar la calidad del producto.
Este evento en Dani Brasserie puso en valor cómo el conocimiento y la tradición se unen para crear platos excelentes. Además, la técnica del ronqueo es fundamental para preservar el sabor y la textura del atún, aspectos esenciales para los chefs y los comensales.
Por otro lado, eventos como este acercan a la gente a la gastronomía real, a entender lo que hay detrás de cada plato y a valorar el trabajo que hay detrás. La sostenibilidad y el respeto por el producto son cada vez más importantes, y el ronqueo es un claro ejemplo de ello.